Dos feminicidios más en Cuba suman nueve desde inicio del 2023

Régimen de Cuba intenta justificar los feminicidios mientras se confirman dos muertes más este jueves

“Hoy en Cuba, es mucho peor pensar diferente políticamente que ser un asesino o un ladrón, mientras los delincuentes comunes campean por las calles, las cárceles se llenan con personas que piensan diferente.

Mientras se reportan dos Feminicidios más en Cuba, el régimen castrista a través de sus medios oficialistas intenta suavizar la crisis por la que atraviesa el país de violencia en contra de las mujeres, que en lo que va del año apenas dos meses ya la cifra asciende a 9 asesinatos.

De acuerdo con una publicación hecha por el medio Cubadebate, “Por estos días, las redes sociales asustan”, donde intenta dar un matiz de chisme de pasillo a lo que hoy alarma a la población cubana y específicamente a las mujeres de la isla.

“¿Estamos ante una ola de femicidios en Cuba? Es difícil saberlo, no conocemos si efectivamente están muriendo más mujeres, o si ahora nos enteramos más”, de esta forma justifica el medio oficialista la cantidad de crímenes que se están produciendo en la isla en la actualidad.

Sin embargo, se debe reconocer, que gracias al internet hoy día es posible enterarse de la cantidad de feminicidios que están teniendo lugar en Cuba, porque de ser por las estadísticas oficiales y la imagen que pretende dar el régimen ante el mundo, en Cuba no pasa nada.

Este jueves, el portal Cubanet, confirmaba los asesinatos de Arisdani Viamontes Tomás en el reparto Buenos Aires, de Camagüey; y de Neisa López Vargas, en Bayamo, Granma. Lo cual incrementa la cifra de mujeres asesinadas en Cuba a nueve en lo que va de año.

Según el medio informativo a Neisa López, a quien la sobreviven dos niños de ocho y cuatro años, fue asesinada en las inmediaciones de su casa alrededor de las 6:00 a.m. del pasado 11 de enero.

 

El asesino, lo cual pudo confirmar CubaNet a través de sus familiares fue un expolicía, quien ya anteriormente había ultimado a su esposa y atacado a su cuñada.

Este expolicía se encontraba bajo libertad condicional por ser paciente de cáncer, según informa el medio.

López Vargas, de 29 años, quien no conocía sobre sus antecedentes, accedió a trabajar con la criminal enfermera por su problema de cáncer, sin embargo, al saber de los violentos crímenes que había cometido su paciente, renunció, lo que no fue aceptado por el asesino, de 66 años.

“Él comenzó a amenazarla y a seguirla en la calle. El día que la mató él estaba escondido cerca de la casa de ella, esperando que regresara de su nuevo empleo”, según confirmó un familiar de la joven.

Lo insólito, es que ya la joven había interpuesto una denuncia contra su victimario en la Unidad Municipal de la PNR de Bayamo, meses atrás, sin embargo, y a pesar de que las autoridades ya conocían el antecedente de asesinato del victimario no se hizo nada.

“Ella lo acusó de acoso y no pasó nada, como siempre”, explicó en Facebook su madrastra, Lien Alvarado. Las autoridades solo detuvieron al victimario después que le propinó 17 puñaladas a la joven, a unos metros de donde estaban sus hijos y su esposo.

Por otra parte, y a menos de una semana de que en Nuevitas, provincia de Camagüey se diera otro asesinato delante de la mirada de la policía, ocurre el asesinato de Arisdani Viamontes Tomás, de 43 años, ultimada por su esposo Yisney López en la casa donde vivían ambos el pasado 27 de enero.

 

El asesino le dio muerte con arma blanca, de acuerdo con un testigo que pidió anonimato al medio informativo, mientras que, hasta el momento, los medios informativos oficialistas han guardado silencio respecto al hecho.

“Ella no quería seguir con él y le pidió el divorcio. Por eso la mató después de 20 años de matrimonio. Los hombres piensan que son dueños de las mujeres y pueden hacer lo que quieran”, señaló la fuente.

Luego de ultimar a su víctima, López huyó, pero fue arrestado ese mismo día por agentes de la Policía. Actualmente se encuentra detenido bajo proceso de investigación.

A Viamontes la sobrevive una hija de 19 años ―fruto de la relación con su victimario―, quien encontró el cuerpo sin vida de su madre, sobre su cama.

Esta es una realidad que se vive en Cuba y que no es nada nuevo, mientras que el régimen de Cuba intenta suavizar, cuando dice que el informe nacional cubano de cumplimiento de la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible reportó una tasa de femicidios de 0.99 por cada 100.000 mujeres de 15 años o más durante el año 2016. 

Sin embargo, el régimen no muestra datos actualizados y mucho menos de los últimos años después del 2016, donde se puedan constatar la veracidad de los hechos divulgados.

Por su parte la Red Femenina de Cuba recalcó «La necesidad de una ley parte del hecho de que la violencia de género no es igual a otros tipos de violencia y que requiere normas, acciones y estrategias específicas”.

“Esto aseguraría, en cierto modo, el compromiso que debe tener el Estado cubano en la lucha contra esta forma de violencia», afirmó Kiana Anandra, una de las promotoras de la actual campaña de la organización en las redes sociales en entrevista a Diario de Cuba.

 

«En Cuba se aprobó una Estrategia en este sentido, que la reduce al marco familiar. Verla solamente en el plano doméstico, cuando es un problema sistémico, reduce muchísimo las reales implicaciones que está teniendo producto de las desigualdades estructurales», dijo.

Insistió en que «el estatus de ley da la potestad de intervenir sobre otras leyes, gana jerarquía y capacidad jurídica por sobre otras leyes y políticas, y por ende, sobre otros ámbitos del Estado y la vida social».

«La ley no va solamente de sancionar o aplicar penas a los delitos. Un estatus de ley crearía las bases para implementar un sistema integral de prevención y atención que sea realmente efectivo para la ciudadanía. De alguna manera transversalizaría a todo el cuerpo normativo cubano», agregó.

En ese «sistema integral», Anandra señaló que, «la creación de protocolos y capacitaciones en instituciones policiales, jurídicas, centros de trabajo y estudio, espacios de militancia política, espacios culturales y medios de comunicación, frente a casos de violencia de género y para su prevención o para el posterior reparo de las sobrevivientes».

«Considero que no puede faltar la transparencia en cuanto al presupuesto público que va a alimentar (la Ley), el tipo de medidas que van a considerar (de protección a las víctimas, prevención, reparación, etc.) o cómo se van a monitorear y evaluar sus resultados», señaló.

Mientras el régimen de Cuba, ha enfocado todas sus fuerzas represivas en desacreditar y apresar a personas que piensan de una manera diferente, encarcelando a cientos de ellos, a quienes han condenado por crímenes comunes, el país se sumerge en una crisis delictiva sin precedentes.

Hoy en Cuba, es mucho peor pensar diferente políticamente que ser un asesino o un ladrón, ese es el criterio de miles de personas y se ve reflejado a diario en las redes sociales.

Hoy el internet y las redes sociales se han convertido en la herramienta para que los cubanos puedan visualizar los problemas que ocurren en la isla, que por años el régimen ha ocultado intentando mostrar al mundo una cara que no es.

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