“La convocatoria del régimen de Cuba a una sesión constitutiva donde se ha de designar a presidente y vicepresidente de la república, es una muestra clara de la falta de separación de los poderes del estado”

El régimen de Cuba, publica hoy a través de los medios oficialistas, la convocatoria que hace el Consejo de Estado, a una sesión constitutiva de la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP), en una farsa donde se pretende designar al presidente del país.

Según la convocatoria publicada por el régimen cubano, la Sesión comienza el próximo miércoles 19 de abril a las 9 a.m.

En esta sesión indica la escueta convocatoria, se eligen por los diputados al presidente y al vicepresidente de la República; y designa, a propuesta del presidente de la República, al primer ministro, a los viceprimeros ministros, al secretario y demás miembros del Consejo de Ministros.

Actualmente ocupa el cargo de presidente del país el dictador Miguel Díaz-Canel, quien, según las leyes del régimen, puede «reelegirse» una vez más.

Cabe destacar que los propios dirigentes del régimen comunista, quienes conforman el poder ejecutivo del estado, forman parte, además, del poder legislativo, ósea, de una forma más clara, los gobernantes, son también los diputados, lo cual es una clara evidencia de la falta de separación de los poderes del estado.

Pero que, a su vez, son los mismos que crean las leyes y controlan el poder judicial, una demostración clara de la falta de democracia dentro de la isla, ya que todos los poderes del estado son controlados por una sola persona o un grupo de estas.

En su cuenta de Twitter, la Presidencia de Cuba escribió, “La Sesión Constitutiva de la Asamblea Nacional del Poder Popular, en su X Legislatura, será el 19 de abril de 2023. Elegirá de entre sus diputados, a su Presidente, Vicepresidente, Secretario y demás integrantes del Consejo de Estado”.

A finales de marzo se realizó un teatro al cual el régimen llamo «elecciones» en la isla para diputados, dicho evento se caracterizó por un abstencionismo total, pese a las falsas cifras publicadas por los medios oficialistas, finalmente tuvo que reconocer casi un 25% de abstencionismo.

Diferentes opositores documentaron muchos de forma clandestina, la falta de personas a estas supuestas elecciones, donde los colegios electorales se encontraban vacíos, sin embargo, como ya es costumbre en una dictadura como la de Cuba, las cifras fueron manipuladas.

Por otra parte, fueron varios los activistas que denunciaron represión en el contexto de las elecciones convocadas por el régimen de La Habana y a otros que no se les permitió la movilidad, siendo esta una violación flagrante de los derechos humanos.

Mientras tanto, la organización no gubernamental Cubalex registró más de 30 incidentes represivos en al menos ocho provincias del país.

Según esta organización en la mayoría de casos se trató de prohibiciones de salida de la vivienda, vigilancia, cortes selectivos de internet y obstáculos para la observación electoral.

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