“La presa política trans Brenda Díaz, ha sido maltratada y torturada en varias ocaciones, siendo lanzada por una escalera por uno de los esbirros de la dictadura comunista”

La presa política Brenda Díaz, quien cumple una condena de 14 años de prisión por manifestarse durante las protestas del 11 de Julio del 2021 se mantiene incomunicada según una denuncia hecha por su mamá Ana Mary García a través de Facebook.

La presa política trans, cumple su condena en la prisión de mujeres Cuba-Panamá, en la provincia Mayabeque, donde a los 14 años a los que había sido sentenciada, se le suma otra condena de siete meses más.

En la denuncia hecha por la madre de la presa política, explicó que hace dos meses no se permite a los reclusos hacer llamadas telefónicas, supuestamente porque un rayo dañó el sistema.

«No sabemos nada. Si hay alguna enfermedad, alguna cosa que suceda con ellos, estamos incomunicados», afirmó García en su directa.

«No solamente mi hija Brenda, que está por las manifestaciones del 11 de julio, sino todos los presos que hay ahí, personas enfermas. Esa es una prisión especial para personas con VIH», dijo la madre angustiada.

Por otra parte, García dejó saber que su hija padece varias enfermedades, incluyendo VIH, y que desconoce si ha recibido atención médica en los últimos dos meses: «Solo quiero pedir justicia, que mi hija se comunique conmigo, que esos teléfonos en dos meses estuvieran arreglados».

La madre de la presa política denunció el abuso al que ha estado sometida su hija y demás presos políticos. De igual forma, responsabilizó a las autoridades por mantener incomunicados a reclusos enfermos y exigió la reparación urgente del sistema telefónico. «Pido libertad para mi hija, pido libertad para todos los presos políticos, libertad para Brenda», exigió.

Según el medio independiente ADN Cuba, la última vez que la madre de la presa política pudo verla fue el pasado 11 de agosto en una visita familiar y que hasta el próximo 5 de septiembre no tiene más visitas.

Por otra parte, agregó que la situación es preocupante pues hace poco murieron dos reclusos en esa prisión.

La mujer trans Brenda Díaz, es presa política por protestar en las manifestaciones de julio de 2021 (11J), por lo cual fue condenada a 14 años de cárcel inicialmente y en abril de 2023 se le sumó otra condena de siete meses, por presunto desacato, tras recibir una golpiza en la cárcel.

Brenda fue sentenciada por supuesto desacato, a pesar de que fue ella la golpeada por un oficial identificado como Frank en febrero último.

Desde su entrada a la cárcel, la joven ha recibido malos tratos por parte de las autoridades penitenciarias debido a su identidad de género, lo cual ha sido denunciado reiteradamente por organizaciones como Prisoners Defenders.

En el mes de octubre del 2022, el mismo guardia antes mencionado la lanzó por unas escaleras.

La presa política fue recluida en la sección de hombres del establecimiento penitenciario, donde fue obligada a raparse la cabeza y a vestirse con ropa masculina.

De igual forma, ha recibido castigos de aislamiento en varias ocasiones en celdas de castigo y no ha recibido adecuada atención médica para sus padecimientos de salud.

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