“El OCC indicó que luego de la revuelta popular de julio del 2021, el régimen cubano ha endurecido con severas sanciones, entre ellas penas de prisión, sus leyes y decretos contra las libertades de opinión, información y expresión en todas sus formas”

El Observatorio Cubano de Conflictos (OCC), presentó este martes su informe mensual correspondiente a agosto, donde se recogen 424 protestas en Cuba, un mes critico que se vio acompañado por la falta de efectivo, por las nuevas medidas del régimen comunista.

La OCC señala en su informe que “la escasez de efectivo seguida por la ‘bancarización”’ decretada por el régimen desató el incremento de las expresiones contestatarias, “al añadir colas de varios días para retirar dinero ─entre otras complicaciones─ a la agobiante vida diaria de los cubanos”.

El malestar ocasionado por los altos precios de los comestibles y las múltiples carencias en el área de la salud siguió siendo motivo de desesperadas protestas en el mes de agosto, indica el reporte del OCC.

El Informe del OCC para el mes de agosto en Cuba, refleja 424 protestas en contra del régimen castrista por diferentes motivos.

En su Plan Pastoral 2023-2030 los obispos católicos calificaron la actual crisis del país como “la más grave de los últimos decenios”, puntualizando que “las carencias de alimentos y medicinas han alcanzado niveles nunca antes vistos entre nosotros”.

De igual forma indica que una ola de delitos y crímenes en Cuba sigue incrementándose. “El OCC compiló en agosto 57 protestas relacionadas con asesinatos, robos con violencia y desapariciones de personas. Incluyendo dos nuevos feminicidios”.

Otro de los factores que influyeron fueron los apagones de 5 a 6 horas en el horario nocturno, que afectaron la cocción y conservación de los alimentos, así como el alivio a las temperaturas del verano más caluroso en décadas, atizaron el desasosiego de la ciudadanía, generando ocasionales cacerolazos y otras formas de protesta.

A lo cual se le suma, el paso del huracán Idalia en la última semana del mes donde al menos 350.000 hogares quedaron sin electricidad en las provincias occidentales.

Así mismo, las reacciones contra la represión continuaron encabezando a todas las categorías del reporte del OCC con 95, mientras que se registraron 55 desafíos a la censura de la libertad de expresión por parte de ciudadanos comunes que tuvieron el coraje de exponer sus penurias en las redes sociales.

Otras fueron voces respetadas como las del coautor (en cautiverio) del tema Patria y Vida, Maykel Castillo, los actores Luis Alberto García, Luis Silva y Carlos Massola, la Conferencia de Obispos Católicos de Cuba, y la superiora de Las Hijas de la Caridad en la isla, Sor Nadieska.

Por otra parte, las manifestaciones de descontento por los problemas de vivienda experimentaron un notable salto, de 10 en julio a 40 en agosto.

Entre lo que se encuentra el caso de una madre se plantó con sus tres hijos frente a la sede del Partido Comunista provincial en Santa Clara para exigir una casa. En Arroyo Naranjo, La Habana, otra madre bloqueó la calle con madera y sombrillas y se paró en el medio junto a sus cuatro hijos menores, en protesta por las pésimas condiciones de su vivienda, explico el OCC.

También varias familias cerraron la calle Figuras entre Monte y Tenerife, en Centro Habana, como protesta por las filtraciones y el deplorable estado constructivo del edificio donde viven, asegurando que solo resuelven las cosas cuando protestan.

El peligro de vivir sin otra opción en miles de edificaciones antiguas semiderruidas que no han recibido mantenimiento en décadas quedó expuesto a fines de agosto por al menos 20 derrumbes ocasionados en La Habana por las copiosas lluvias del ciclón Idalia.

De igual forma el reporte de agosto del OCC valora como un factor a tener en cuenta en la diferencia entre las cifras de protestas de julio (589) y agosto (424) las esperanzas de emigrar que ha despertado el programa de visas parole humanitarias de Estados Unidos, por el cual se ha informado que salieron del país 35.000 cubanos en el primer semestre de 2023.

El OCC cataloga como protestas para su informe mensual a las manifestaciones presenciales como sentadas, cacerolazos y marchas; a los grafitis, declaraciones a medios independientes, comentarios dejados en medios oficiales, posts, fotos, videos, memes y transmisiones directas en las redes sociales”. Incluye, además, “otros formatos como dibujos y composiciones musicales o poéticas, etc”.

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