“El régimen de Cuba continua con la exportación de médicos a otros países, mientras la población se encuentra desprovista de atención y con una escasez enorme de medicamentos”

El régimen de Cuba no escatima esfuerzos para seguir sacando provecho de las misiones médicas que son contratadas por otros países, mientras la población se queja de la falta de médicos en los centros de salud y de la falta de medicamentos.

El medio local portugués Jornalismo de Saúde, publicó este miércoles, que el gobierno de este país se dispone a contratar 300 médicos cubanos que serian integrados al sistema nacional de salud (NHS), lo que ha causado molestias dentro del gremio médico de ese país.

Para la contratación de estos médicos cubanos, el gobierno de Portugal ya ha solicitado el dictamen sobre el proceso de reconocimiento de títulos al Consejo de Facultades de Medicina de Portugal y a la Asociación de Médicos de dicho país.

La noticia, ha llevado a unos 150 médicos a iniciar una huelga de dos días frente al Hospital Santa María, en Lisboa, la cual fue convocada por la Federación Nacional de Médicos (Fnam).

“Es obvio que, cuando hay escasez de médicos, no hay problema en que vengan profesionales de otros países a complementar el SNS. El problema es que faltan médicos, porque el Gobierno no puede dar a los médicos portugueses, médicos que se formaron en Portugal, las condiciones para quedarse aquí”, lamentó Mariana Mortágua, líder de Federación Nacional de Médicos (FNAM).

Mariana Mortágua destacó que “nunca habían emigrado tantos médicos como ahora”, porque los jóvenes se gradúan del SNS, pero luego no pueden quedarse.

Cuando se le pidió declaraciones sobre lo sucedido al primer ministro, António Costa, este dijo: “Cada uno tiene sus razones. Yo no soy del sindicato de médicos de aquí”, pero la presidenta del “sindicato portugués”, Mariana Mortágua, afirmó que el jefe de Gobierno “intentó crear una división entre los portugueses y los médicos”.

Reacciones de médicos cubanos en el exilio

Las reacciones de los médicos cubanos exiliados y que conocen de primera mano como funcionan estas misiones médicas cubanas, no se hicieron esperar, respondiendo a la publicación del medio portugués.

El médico cubano Lucio Enriquez Nodarse, escribió en Twitter: “Hola, soy médico cubano y vengo a decirles que la dictadura cubana exporta a los países la esclavitud moderna con el envío de médicos de pésima formación a otros países que tengan este tipo de conflictos”.

“Los médicos cubanos son mano de obra barata, esclavos asalariados que trabajan por mucho menos de lo que les pagan a los médicos del país a donde van y mucha más de lo que ganarían si estuvieran en Cuba”, agregó.

“Ya se han hecho cientos de denuncias sobre este tema a nivel mundial y ya la ONU ha catalogado como esclavitud moderna la contratación de médicos cubanos por otros gobiernos y la corrupción asociada por las grandes ganancias que existen entre gobiernos que hacen esta contratación, siendo los médicos cubanos fichas del juego mal pagadas”.

“Los responsables de que esto no suceda son los colegios médicos de cada país que no deberían permitir la entrada de los médicos cubanos”, concluyó el galeno cubano residente en España.

Por otra parte, la población en la isla se ha quejado de la falta de especialistas y médicos en general para la atención del pueblo, que atraviesa una de las peores crisis económica y social de la historia del país.

En el mes de marzo, el gobierno mexicano anunciaba la contratación de 600 médicos, lo cual se sumaba a 610 que ya se encontraban el país, lo cual causó igualmente la molesta del gremio médico mexicano.

Mientras tanto, el Instituto Cubano de Libertad de Expresión y Prensa (ICLEP) denunció a través de sus redes sociales la persistente escasez de medicamentos para controlar la hipertensión en la provincia de Villa Clara.

Sin embargo, reconoció que se había distribuido el Captopril en varias farmacias de Santa Clara, lo cual no fue suficiente para cubrir la demanda de todos los pacientes.

Así mismo denunció la venta de estos medicamentos en el mercado informal “a un precio exorbitante de 300 pesos cada uno” y señaló que es un medicamento que se produce en el país, siendo parte de un entramado de corrupción que se venden en el mercado negro.

“El régimen no se proyecta en función de controlar el desorden y la malversación de medicamentos existente en la provincia”, escribió ICLEP.

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