“Las acusaciones del régimen cubano contra EEUU se producen en medio de el enjuiciamiento del exdiplomático estadounidense, Víctor Manuel Rocha, quien esta acusado de ser un espía del régimen”

El Departamento de Estado de EEUU negó este martes pasado que estuviera planeando ataques violentos contra Cuba, luego de que la isla comunista afirmara que Washington buscaba fomentar disturbios antes del Año Nuevo, explicó un funcionario a la agencia Reuters.

Según afirmó este lunes el Ministerio del Interior del régimen castrista en las redes sociales sobre «planes del Departamento de Estado de EEUU y la comunidad de inteligencia para incrementar los ataques subversivos y violentos contra Cuba con el fin de generar un estallido social antes de finales de 2023″.

Mientras tanto, un funcionario del Departamento de Estado ha rechazado esta idea.»Las acusaciones de que Estados Unidos está fomentando acciones violentas contra el gobierno cubano son absurdas», respondió el funcionario en un correo electrónico al medio noticioso.

Sin embargo, como es costumbre, el gobierno cubano no ha proporcionado ninguna prueba concreta de sus afirmaciones sobre un complot de EEUU contra la isla.

La dictadura comunista, publicó la semana pasada una lista de más de 80 ciudadanos extranjeros y entidades a las que acusa de terrorismo, incluidos influencers, disidentes que residen en Estados Unidos y un candidato a la alcaldía del condado de Miami-Dade en Florida.

El show mediático del régimen se produce poco después que fueran revelados 15 cargos contra un exdiplomático estadounidense, Víctor Manuel Rocha, de 73 años, a quien se le acusa de haber conspirado para actuar como agente al servicio de Cuba.

Por su parte, el fiscal general de EEUU, Merrick Garland, ha dicho que «la investigación criminal revela que durante más de 40 años Rocha actuó como agente encubierto del gobierno cubano”.

Mientras que Cuba no ha hecho referencia al caso, cuya audiencia de presentación de cargos estaba prevista para este martes en el Tribunal Federal de Miami, sin embargo, la misma se pospuso por segunda vez para el 12 de enero próximo, según información del medio noticioso Martí Noticias.

Dentro de todo el show que promueve el régimen comunista de la Habana, el sábado pasado, se divulgó a través de los medios oficialistas que se había frustrado un complot terrorista ideado por los cubanos en el sur de Florida que involucraba a un hombre armado que llegaba a suelo cubano ridículamente desde EEUU en una moto acuática.

Por su parte, el funcionario del Departamento de Estado calificó la lista y las acusaciones de Cuba como un esfuerzo por menospreciar a sus propios ciudadanos en el extranjero.

«Estas acusaciones más recientes son la versión más reciente de los esfuerzos de las autoridades cubanas para menospreciar a los emigrantes que ejercen su libertad de expresión, incluyendo críticas al pésimo historial de derechos humanos y la implacable represión de Cuba», señaló el funcionario.

El contrapunto destaca la gélida relación entre Cuba y EEUU, que apenas ha mejorado desde que el presidente estadounidense Joe Biden asumió el cargo en 2021.

El año pasado, Biden eliminó parcialmente algunas restricciones de la era Trump sobre las remesas y los viajes a Cuba, pero no ha cedido en la decisión de Trump de designar a la nación insular como Estado patrocinador del terrorismo, cargando al país con nuevas y severas sanciones.

Un informe reciente del gobierno estadounidense dijo que Cuba también «concede puerto seguro a los terroristas», acusaciones que La Habana niega.

Mientras tanto, el régimen de Cuba ha arreciado su represión contra opositores cubanos, recientemente la Fiscalía de Cuba anunció peticiones fiscales de hasta 30 años de prisión para tres personas a las que acusa de «atacar con bombas incendiarias entidades estatales y pintar carteles contra la revolución luego de presuntamente recibir financiamiento de grupos radicados en Estados Unidos«,

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