Espía Manuel Rocha es condenado a 15 años de cárcel
“Víctor Manuel Rocha, ha sido hallado culpable de participar en actividades clandestinas a favor del régimen cubano desde -al menos- 1981, cuando comenzó a trabajar en el Departamento de Estado”
El espía Víctor Manuel Rocha, que trabajó durante décadas para la dictadura cubana se declaró este viernes culpable de actuar como agente del régimen cubano y fue condenado a 15 años de prisión, según dio a conocer el medio informativo Martí Noticias.
“Hoy ya no veo el mundo con la mirada radical de mi juventud”, dijo Rocha durante la audiencia de sentencia que incluye además tres años de libertad supervisada y una multa de 500.000 dólares.
Rocha quien ya cuenta con 73 años de edad se ha declarado culpable de conspirar para defraudar a Estados Unidos como agente extranjero y no registrarse como agente extranjero como parte de un acuerdo con el gobierno federal.
Adicional a esto, según el medio, Rocha admitió haber traicionado su juramento de lealtad a los Estados Unidos durante sus «dos décadas en el Departamento de Estado”.
Por su parte, la jueza federal Beth Bloom quien había rechazado inicialmente este viernes un acuerdo entre la Fiscalía y la defensa del ex diplomático por considerar que la única víctima no era el gobierno de Estados Unidos y no estaba de acuerdo con la restitución propuesta de medio millón de dólares.
Adicional a esto, Bloom pidió que se le retire la naturalización con la que obtuvo la ciudadanía estadounidense. “Sus acciones fueron un ataque directo a nuestra democracia y a la seguridad de nuestros ciudadanos”, sentenció la magistrada Bloom.
En el acuerdo de culpabilidad de Rocha se le obligaba a compartir con el gobierno estadounidense “una evaluación completa y detallada del daño que se cometió”.
Según Jonathan Douglas Stratton, uno de los fiscales, “fue increíblemente valioso que el acusado no sólo se declarara culpable y admitiera su conducta criminal, sino que continuara cooperando con los Estados Unidos”.
El periodista Mario J. Pentón dio una cobertura detallada de todos los sucesos durante el juicio y sobre todo recogió las impresiones de una representación de la comunidad cubana que se encontraba en el lugar exigiendo un castigo a Rocha por los daños ocasionados al pueblo de Cuba.
Por su parte, el Departamento de Justicia de EEUU consideró que este caso se ejemplifica la amenaza que representa el gobierno de Cuba y demuestra que infiltrar al gobierno de Estados Unidos es una prioridad para el gobierno de Cuba junto a sus aliados, China y Rusia.
Mientras tanto, el fiscal general de los Estados Unidos Merrick B. Garland aseguró que el caso Rocha «expone una de las infiltraciones de mayor nivel y duración en el Gobierno de Estados Unidos por parte de un agente extranjero”.
“Alegamos que, durante más de 40 años, Víctor Manuel Rocha actuó como agente del gobierno cubano y buscó y obtuvo puestos dentro del Gobierno de Estados Unidos que le proporcionaban acceso a información no pública y la posibilidad de afectar la política exterior estadounidense», agregó Garland.
La trayectoria de Rocha al servicio de la dictadura cubana
Según los documentos judiciales, Rocha, quien tiene 73 años, ha sido hallado culpable de participar en “actividades clandestinas” a favor del régimen cubano desde -al menos- 1981, cuando comenzó a trabajar en el Departamento de Estado.
Durante un periodo de más de 40 años, Rocha mantuvo encuentros secretos con oficiales de inteligencia del régimen cubano a los que proporcionó información sensible de Estados Unidos.
Así mismo el espía aparentaba ser partidario del ex presidente Donald Trump y era cercano a círculos del exilio cubano donde era una voz respetada. Durante algunas entrevistas en medios del exilio cubano repetía una y otra vez que la principal amenaza del régimen cubano a EEUU era un éxodo masivo.
En el 2023 un agente secreto del Buró Federal de Investigaciones se reunió con Rocha bajo la falsa identidad de «Miguel», un oficial de inteligencia del régimen cubano. En las citas, los oficiales norteamericanos se percataron de que Rocha utilizaba técnicas aprendidas de la inteligencia cubana para evitar seguimientos.
Mientras Rocha creía que hablaba con un agente del régimen de Cuba, Rocha alabó a Fidel Castro en las conversaciones que quedaron grabadas y dijo que Estados Unidos era su enemigo. También se refirió a su trabajo a lo largo de décadas contra este país como “más que un grand slam”.
Rocha enfrenta además una demanda civil
Luego de que ha sido condenado, Rocha deberá también responder ante una demanda civil interpuesta por Ofelia Payá, la viuda del reconocido disidente cubano Oswaldo Payá, quien murió en 2012 en un accidente de tránsito considerado un asesinato político por su familia y organizaciones internacionales, como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.
El espía al servicio del régimen “ayudó directamente a funcionarios cubanos, proporcionándoles información crítica que obtuvo a través de su autorización de seguridad ultrasecreta y sus roles influyentes. Cuba no habría podido ejecutar a Payá con impunidad sin que el acusado conspirara y le proporcionara inteligencia y ayuda a la dictadura de Cuba”, asegura la demanda.
“Debajo de este barniz de lealtad y servicio a los Estados Unidos, el acusado mantuvo una lealtad clandestina al régimen cubano”, agrega el texto, donde se le imputa como cómplice del asesinato.
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