“Tras reubicar a las victimas del derrumbe en un local en mal estado, el régimen amenaza a los dignificados para que no comenten con la prensa independiente”

Luego que el dictador cubano Miguel Díaz-Canel prometiera brindar “toda la ayuda” a los sobrevivientes del derrumbe ocurrido en Lamparilla No.388, entre Villegas y Aguacate, el pasado 4 de octubre, estos han sido ubicados en un local en pésimo estado de Cuba Tabaco.

Tras un reporte hecho por el periodista Mario J. Pentón en sus redes sociales, se pudo conocer que las familias víctimas del derrumbe, estuvieron durmiendo unos días en una escuela y posteriormente fueron trasladadas a ese local.

A través de un video publicado por el periodista en X se puede observar la falta de higiene del establecimiento, donde los inodoros están tapiados y no hay agua ni los muebles necesarios para poder vivir.

“El gobernante Díaz-Canel les prometió «toda la ayuda» tras desplomarse su edificio y perder sus viviendas. Populismo y sentimentalismo barato”, escribió el periodista cubano refiriéndose a la mentira del dictador comunista.

“Tras dormir por días en una escuela, las familias damnificadas de Lamparilla 388 han sido trasladadas a un local de Cuba Tabaco en pésimas condiciones y amenazadas para que no cuenten lo que sucede a la prensa independiente”, agregó Pentón sobre las condiciones de los cubanos víctimas del derrumbe.

El derrumbe ocurrido en días pasados, del edificio multifamiliar dejó un saldo de tres fallecidos: dos rescatistas y un residente del lugar, de acuerdo con los medios oficialistas y del gobierno de La Habana.

En el reporte se conoció que alrededor de 50 personas habían sido evacuadas del lugar y dos de ellas trasladadas al Hospital Calixto García.

Los videos que circularon a través de las redes sociales, mostraron el fatídico derrumbe donde una parte del edificio se vino abajo por segunda vez, mientras los bomberos realizaban labores de rescate en el interior.

En los videos se pudo apreciar el pánico y la desesperación de las personas que presenciaron el derrumbe desde la calle y otros inmuebles.

Los derrumbes se han convertido en algo usual, sobre todo en La Habana, donde por años el régimen no ha destinado fondos para dar mantenimiento a inmuebles muy antiguos, lo que ya esta pasando factura los cubanos.

En el mes de septiembre se produjo otro derrumbe de una vivienda de la calle Compostela No. 913, entre Velazco y Desamparado, en el municipio de La Habana Vieja, este dejo un saldo de un fallecido, un hombre de 54 años identificado como Jorge Luis Jorrín Guides, según fuentes del oficialismo.

De igual forma, luego de las intensas lluvias que trajo la tormenta Idalia, las autoridades del régimen en la capital reconocieron el derrumbe de casi 20 viviendas, lo que causó lesiones leves a tres personas, incluido un menor de edad.

Sin embargo, el régimen castrista no se ha pronunciado con un plan concreto para evitar que se sigan perdiendo vidas humanas con estos derrumbes, aunque no ha dejado de edificar lujosos hoteles para el turismo internacional.

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