“El régimen de Cuba niega que a los profesionales cubanos que cumplen misión en el extranjero se les retire el pasaporte, sin embargo hay más de 500 testimonios que dicen los contrario”

El régimen de Cuba ha dado respuesta a la ONU con 20 días de retraso de los 60 días que tenia para responder, sobre las acusaciones que pesan sobre el régimen sobre esclavitud y trabajo forzoso de profesionales cubanos en misiones castristas.

La organización no gubernamental Prisoners Defenders, tuvo acceso a la carta enviada por el régimen de la isla en respuesta a las reiteradas acusaciones de las que han sido objeto y que presentan los testimonios de los profesionales cubanos que han abandonado las misiones en otros países.

Según ha publicado la ONG, la respuesta castrista es una muestra clara de que régimen ejerce el Esclavismo Capitalista de Estado.

De acuerdo con el Comunicado del Relator se indica que “la exportación de personal profesional especializado, particularmente sanitarios, sigue siendo la principal fuente de ingreso del Gobierno de Cuba…”

Las misiones médicas de Cuba en el extranjero, se han convertido en la primera entrada de ingresos del régimen comunista.

Las cifras indican que Cuba, “está ejerciendo el capitalismo esclavista de Estado con motivos exclusivamente económicos, gracias a la extracción de los salarios de los profesionales, la peor lacra de la humanidad que el ser humano debió haber dejado atrás tras el negro recuerdo de siglos pasados, donde numerosos estados, como Corea del Norte y Cuba ahora, ejercían la esclavitud y trabajo forzoso de manera institucional”, indica el informe.

De acuerdo con Prisoners Defenders, el régimen de Cuba no respondió a las explícitas acusaciones referidas a su legislación esclavista (Código Penal de Cuba, art. 176, Resolución 368 de 202 del Mincex).

En las respuestas dadas por el régimen castrista, dijo que “la relación jurídica de trabajo, en tanto acto jurídico, se configura y consagra a partir del principio de voluntariedad de las Partes”.

Sin embargo, el 75% de los colaboradores de las 1,402 declaraciones juradas que Prisoners Defenders entregó al Relator Especial indicaron que “NO FUERON VOLUNTARIOS”, explica la ONG.

Por otra parte, el régimen llega a decir que, “el profesional es libre de poner fin a ese Contrato Individual de Trabajo”, pero inmediatamente indica algo que es significativo, “y regresar a Cuba o, en su caso, optar por otra situación migratoria”, admitiendo que si dejan el contrato tienen que regresar a Cuba o atenerse a la legislación migratoria, entre ellas el Código Penal, artículo 176.

De igual forma, el régimen de Cuba, justifica en su carta por “la necesidad de potenciar y atemperar las regulaciones migratorias del país al contexto actual ante el uso hostil, subversivo y desestabilizador de su política migratoria contra los intereses legítimos de nuestro pueblo, que alienta la emigración ilegal e insegura … y el robo de cerebros”.

Por otro lado, el régimen indica que “la economía está por encima de los derechos más básicos del trabajador, aceptando sin ser consciente sobre la servidumbre de tipo capitalista que somete a los trabajadores civiles cubanos en el exterior”.

De los 1.402 trabajadores civiles cubanos en el exterior que han declarado ante Naciones Unidas el 78% de ellos no van voluntariamente, y el 12% adicional se presentan voluntarios por motivos coercitivos, entre los que destacan el “temor a ser marcado negativamente en su entorno profesional y personal”.

Cuba aseguró, además, al Relator que paga a sus trabajadores en el exterior “una remuneración en cuantía suficiente para satisfacer sus necesidades de alimentación y vestido en el exterior de una manera digna”.

Por otra parte, el régimen comunista de la isla, negó que le retirara los pasaportes a los trabajadores cubanos que cumplen en las misiones, sin embargo, 560 testimonios, afirmaron ante Naciones Unidas que “les retenían el pasaporte durante el trabajo en la misión”.

Vea el informe completo Aquí.

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