“Las autoridades de Cuba guardan silencio ante el tráfico de personas que son enviados a Rusia para la guerra con Ucrania, la mayoría de ellos civiles sin experiencia ni preparación militar”

El Ministerio de Relaciones Exteriores y el gobierno de Cuba guardan silencio ante recientes denuncias que han salido a la luz, sobre el reclutamiento de ciudadanos cubanos, sobre todo jóvenes, para pelear en la guerra de Rusia contra Ucrania, quien fuera invadida desde febrero del 2022.

Andorf Antonio Velázquez García y Alex Vegas Díaz, son dos jóvenes cubanos de apenas 19 años de edad, uno residente en La Habana y el otro de Santa Clara, quienes a través de las redes sociales encontraron una oportunidad de ir a trabajar en la construcción en Rusia.

Debido a la situación deprimente en la que se encuentra en estos momentos la economía de la isla y la falta de oportunidades que la dictadura castrista ha negado a la juventud a través de un sistema fallido, los jóvenes cubanos vieron una oportunidad de progresar y generar ingresos a los cuales no tienen acceso en Cuba.

De acuerdo con testimonios de los propios jóvenes cubanos, quienes se encuentran detenidos en una unidad militar en Rusia, una mujer a la cual se le nombre como Elena “La Rusa”, es la encargada de hacer los reclutamientos en la red y pagar los boletos para ser llevados a Rusia.

Una vez en Rusia, a los jóvenes se les retira el pasaporte y se les hace firmar un contrato escrito en ruso, donde además de no tener acceso a una traducción los muchachos son amenazados con penas de cárceles por incumplimiento.

El medio informativo América Tevé tuvo acceso al número telefónico de la mencionada Elena y mantuvo una conversación de texto, lo cual probó la existencia de dicho contacto, sin embargo, esta se negó a dar declaraciones que desmintieran la veracidad de lo dicho por los jóvenes detenidos.

Varios medios independientes, así como diferentes influencers han publicado la situación de la trata de personas que se lleva a cabo desde Cuba, un país donde el régimen controla todo, por lo que la situación es de conocimiento de las autoridades y muy probable esta actividad se hace con la anuencia de los mismos.

Recientemente, el influencer Alain Paparazzi daba a conocer en un video las imágenes y los testimonios de la mujer que se encarga de hacer los reclutamientos a los ciudadanos en la isla, demostrando una vez más la inacción de las autoridades y la complicidad que existe en cuanto a este tema.

Nuestra redacción, ha tenido la oportunidad de contactarse tanto con el padre, como con ambos jóvenes recluidos en una unidad militar en Rusia, recibiendo testimonios de como fueron golpeados por soldados rusos y llevados a la línea de guerra en Ucrania.

A pesar de que los dos cubanos, son bajas medicas del servicio militar en Cuba, por razones de salud, ambos fueron vestidos de militar y llevados al frente, donde posteriormente enfermaron y fueron trasladados a un hospital militar.

En sus testimonios, han denunciado que existen decenas de cubanos desaparecidos en el frente y que no son solo ellos los que han sido llevados a Rusia con engaños, sino que constantemente están saliendo aviones cargados con cientos de civiles para ser enlistados en las tropas rusas.

Mientras tanto, el padre de uno de los jóvenes, Mario Velazquez  ha estado visibilizando la situación e intentando conseguir el apoyo de políticos en EEUU, para generar una mayor presión internacional a través de la opinión publica y de esta forma obtener la libertad de ambos muchachos.

Sin embargo, el régimen castrista a través del Minrex y el gobierno, han guardado silencio ante una situación de trafico de personas que es totalmente evidente, donde existen pruebas contundentes y que ellos no han salido de forma alguna a refutarlas.

A finales de la década del 70 e inicio de los 80´s, el gobierno castrista envió a Angola y a varios países de África, a millones de cubanos, muchos de los cuales eran civiles y se les obligaba bajo amenazas a ir a pelear en estos países, donde cientos de cubanos perdieron la vida.

La gran mayoría de estos viajaban en brigadas de la construcción y en misiones supuestamente civiles, sin embargo, al llegar a Angola se les obligaba a vestir de militares y a portar armas, sin previa preparación militar ni experiencia en conflictos armados.

Cientos de estos cubanos, resultaron muertos en combate y nunca el régimen castrista reconoció a ninguna de sus familias de forma económica, a pesar de que el régimen recibía una jugosa compensación monetaria.

En aquel entonces, Rusia era quien suministraba al ejercito de la isla, llegando a ser el mayor ejercito del mundo con soldados fuera del país, las armas con las que se peleaba en Angola, Namibia y otros países de África.

Hoy la historia se repite, y tras la necesidad de Rusia de incrementar sus tropas ya diezmadas, necesita conejillos que sirvan de carne de cañón para pelear contra Ucrania que ha resultado ser mucho más duro de lo que pensó Vladimir Putin.

El tráfico de civiles cubanos, se suma a la lista de tropas boinas negras que han sido denunciados en esta guerra de Rusia contra Ucrania, volviendo el régimen comunista a prestarse para la muerte de cubanos en guerras ajenas, donde el principal perjudicado es la ciudadanía.

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