“Mientras Cuba se queja del bloqueo, los barcos petroleros cargan crudo en México, echando por tierra las mentiras con las que se escuda la dictadura comunista”

Cuba ha aumentado las importaciones de petróleo desde México utilizando sus propios barcos tanqueros, superando a Rusia como proveedor clave de petróleo para la isla que ha confrontado gran escasez de combustible, según un monitoreo de embarcaciones, dijo Reuters.

En medio de una enorme crisis de grandes filas para llenar los tanques de los automóviles y cortes constantes de electricidad el régimen comunista ha ampliado sus fuentes de importación de petróleo en un movimiento para aliviar la escasez de combustible, reponer las existencias.

De igual forma intenta reducir la dependencia de su tradicional y más grande. proveedor, Venezuela, a quien Estados Unidos sancionó su industria petrolera desde 2019 por fraude electoral.

En este momento, México se ha convertido en uno de los principales proveedores, enviando petróleo en un buque propiedad de la petrolera estatal Petróleos Mexicanos (Pemex) y barcos administrados por Cuba.

De acuerdo con el reporte, México ha entregado unos 2 millones de barriles en los últimos cuatro meses, según mostró un recuento de Reuters basado en el seguimiento de petroleros.

Desde julio, el petrolero con bandera cubana Vilma ha completado dos viajes desde la terminal de Pajaritos en México a las refinerías cubanas de Cienfuegos y La Habana. El barco transportó previamente crudo venezolano y fuel oil a Cuba, según datos de Refinitiv Eikon.

Por otra parte, el petrolero con bandera cubana Delsa también entregó crudo de Pajaritos en México a Cienfuegos en junio, y luego navegó a Venezuela, donde cargó petróleo, según mostraron los datos.

Ambos petroleros cubanos no están sancionados

Los petroleros Vilma y Delsa se encuentran entre los pocos petroleros cubanos que no han sido sancionados por la Oficina de Control de Activos Extranjeros del Departamento del Tesoro de Estados Unidos.

Mientras que, otros barcos cubanos han sido reparados o inspeccionados en los últimos años en un astillero en Veracruz, México, incluido el Esperanza, que se encuentra incluido en la lista negra de Estados Unidos, y actualmente se encuentra allí.

Por su parte, un portavoz del Departamento de Estado de EEUU dijo al medio informativo Reuters en abril que Washington estaba «consciente de que Cuba compra petróleo de una variedad de países, tanto sancionados como no sancionados».

El petrolero Bicentenario de Pemex ha completado por separado al menos cuatro viajes desde México a Cuba este año, de acuerdo con los datos.

En total, México ha suministrado a Cuba unos 13.000 barriles por día (bpd) de crudo ligero Olmeca desde abril, según mostraron los datos. El crudo se adapta mejor a las antiguas refinerías de Cuba que el petróleo pesado de Venezuela.

Mientras que Venezuela en los últimos años ha tenido problemas para producir suficiente combustible para las necesidades internas, reduciendo lo que podría exportar. Sus envíos a Cuba este año hasta julio cayeron a 55.000 bpd desde casi 80.000 bpd en 2020.

México y Venezuela fueron proveedores constantes de crudo a Cuba bajo el Pacto de San José en la década de 1990.

Si bien Venezuela expandió las exportaciones a la isla desde que acordó un pacto comercial bilateral en 2000, México solo había enviado cargamentos esporádicamente a Cuba por razones humanitarias hasta este año.

Cuba casi siempre tiene escasez de combustible

Por su parte, Rusia había suministrado a Cuba alrededor de 12.000 bpd de petróleo, en su mayoría crudo, entre febrero y julio, según datos de Eikon.

Cuba casi siempre tiene escasez de combustible, pero nunca más que durante los bochornosos meses de verano, cuando los residentes encienden el aire acondicionado (Quien los tiene) y agotan las reservas.

Este año, el gobierno cubano comenzó a restaurar sus decrépitas centrales eléctricas alimentadas con petróleo. Esas reparaciones y mayores suministros de combustible de Rusia y México han contribuido a una generación más estable y menos apagones este año que el anterior.

Pero los productos refinados que se utilizan en los vehículos de pasajeros, el transporte público y en algunos generadores de energía han escaseado desde marzo, lo que obligó al gobierno a racionar las gasolineras.

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