“Díaz-Canel pide más trabajo al pueblo en momentos donde existe una hiperinflación en la isla y un pueblo buscando la manera de escapar del infierno en la tierra”

A menos de 14 días de finalizar el año, el dictador cubano Miguel Díaz-Canel pide “desatar las fuerzas productivas, y también las fuerzas espirituales de la Revolución”, en medio de una crisis que ha venido empeorando desde hace 65 años.

Sin que el régimen se haya podido poner de pie por sus propios medios, las declaraciones de Díaz-Canel se dan este sabado en la clausura al VII Pleno del Comité Central del Partido Comunista, según dio a conocer el medio oficialista Cubadebate.

Díaz-Canel, llamó a “redescubrir el aliento mítico de la Revolución, y desde él levantarse; reencontrar los caminos de leyenda y heroísmo”, en momentos donde la mayoría de los cubanos buscan una via para escapar de la insostenibilidad en la que hoy se sobrevive en Cuba.

El mandatario designado, quien muestra su delirio de emperador omnipotente expresó “la fortaleza de la política exterior de la Revolución cubana”, sin embargo, no ofreció detalles de los más de 28 derrumbes que han tenido lugar en La Habana, en una ciudad que se encuentra en ruinas.

De esta forma Díaz-Canel, dijo señaló que “Cuba, su desempeño y ejemplo a nivel planetario”, frustro el intento del imperialismo de aislar y someter al país, refiriéndose a la excusa infaltable que es el supuesto Bloqueo.

Así mismo Díaz-Canel destacó el papel de Cuba frente del Grupo de los 77 y China, en calidad de presidente pro-témpore, que lo ha llevado a el y a su esposa a viajar en jets privados gastándose millones de dólares, mientras el pueblo cubano sigue sumergido en la peor crisis de la historia republicana.

A modo de subir los ánimos ante el descontento generalizado que mantiene la población cubana en estos momentos, el dictador Díaz-Canel dijo que, ““Pero no nos podemos abrumar, ni agobiar, desunir ni desmovilizar”, pese al descalabro que atraviesa el país.

A través de la acostumbrada verborrea que caracteriza al régimen Díaz-Canel llamó a tener “confianza en la victoria”; y a tener la certeza de que los cubanos superarán sus desafíos con trabajo, talento y creatividad propia; “o sea, con resistencia creativa”, una retorica que han venido utilizando los comunistas por 65 años.

Entre las cosas que llaman la atención de la verborrea comunista del mandatario, resalta que el mismo hizo nuevamente alusión a unas palabras de Fidel Castro en el 2000, donde el ya fallecido dictador llamó a “cambiar todo lo que debía ser cambiado”.

En la intervención del mandatario designado, arremetió contra los cubanos que piden un cambio en el país, ante la debacle de las medidas fallidas del régimen castrista y los llamó mentes enfermas y terroristas.

Por otra parte, Díaz-Canel reconoció que las medidas tomadas por Alejandro Gil, viceprimer ministro y titular de Economía y Planificación, para detener la inflación, no han tenido los resultados esperados, sin embargo, no habló de que el funcionario sigue en su puesto y no es la primera vez, todos los planes económicos en Cuba han sido un fracaso total.

Cuba vive en momentos donde la economía esta completamente en bancarrota, donde las industrias principales enfrentan la peor crisis de toda la historia, tal como lo es la industria azucarera, que no logra despuntar y cada vez es peor.

“Todavía las medidas y acciones aprobadas para salvar la industria azucarera no logran su cometido, pues no se ha detenido el decrecimiento cañero; y, por el contrario, persisten la disminución de las plantaciones, el incremento de áreas vacías, los bajos rendimientos agrícolas, los altos niveles de enyerbamiento y la inadecuada composición de las cepas”, publicó Cubadebate en Facebook.

Sin embargo, el régimen culpó a “la mala calidad de las reparaciones y del mantenimiento”, así mismo a la “obsolescencia de una industria en la que hace cuatro años no se aseguran los financiamientos para la adquisición de recursos materiales”, una tarea que es responsabilidad de ellos mismos quienes acaparan el control de toda la economia.

Por otra parte, agrega la información del propio régimen, que influyen además factores subjetivos asociados a la deficiente planificación, organización, ejecución y control de la zafra, simplemente culpa de ellos mismos, quienes piden más trabajo al pueblo.

Pese a toda esta acumulación de fracasos y de experimentos fallidos, Díaz-Canel aseguró que la solución está en “trabajar y hacerlo bien”, mientras mantiene en sus puestos a los funcionarios castristas que han llevado a toda una nación a la ruina.

A pocos días de finalizar este 2023, los cubanos no tienen como poner la comida en su mesa y mucho menos celebrar el fracaso de una revolución fallida, con un sistema sanitario deplorable, una hiperinflación y un pueblo buscando la forma de escapar del infierno en la tierra.

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