“Ya suman unos 12 mil casos sospechosos del virus del Oropuche en medio de una situación crítica en el país donde la isla enfrenta la falta de insumos y medicamentos”

Desde el mes de marzo se venía hablando de los casos de Oropouche en Cuba y de una enfermedad extraña que estaba circulando en Santiago de Cuba, mientras que las autoridades sanitarias hacían caso omiso a lo que estaba por llegar.

No fue hasta mucho después en el mes de mayo, cuando se dieron a conocer los primeros casos confirmados, y fue cuando el régimen de Cuba saco en la televisión al Dr. Francisco Durán García, director nacional de Epidemiología del Ministerio de Salud Pública, quien al igual que durante la pandemia intento minimizar la situación.

Sin embargo, en esa ocasión Durán García dijo que, no se podía «restar importancia» al virus del Oropouche, y aseguró que, hasta el momento, no se reportaban casos graves, críticos, ni fallecidos.

Este martes, Cuba informó a través de los medios oficialistas que ya suman unos 12 mil casos sospechosos del virus del Oropuche en medio de una situación crítica en el país donde la isla enfrenta la falta de insumos y medicamentos, aunado con una insalubridad generalizada.

Estas cifras se dieron a conocer esta semana durante un encuentro del gobernante Miguel Díaz-Canel en un show político con científicos y expertos en salud que hablaron, entre otros temas, de la necesidad de obtener un test rápido para detectar el virus.

Según dijeron, hasta el momento la enfermedad se diagnostica con un examen de sangre.

«Vamos a hacer fuertes estudios entomológicos, porque hay que conocer más el vector, por lo que estamos haciendo un grupo importante de investigaciones en el orden virológico que tienen como centro de referencia al Instituto de Medicina Tropical Pedro Kourí», explicó la doctora Ileana Morales, directora de Ciencia e Innovación Tecnológica del Ministerio de Salud Pública.

De acuerdo con Morales, están intentando «caracterizar clínicamente» cómo es la enfermedad en ancianos, niños y embarazadas y cómo el cambio climático influye en los brotes epidémicos.

Sin embargo, las últimas cifras que ofrecieron las autoridades de Cuba sobre el Oropouche fue en el mes de agosto. En ese momento, aunque reconocieron que la enfermedad estaba presente en todo el territorio nacional, hicieron referencia a 506 casos confirmados, aunque especialistas advirtieron que la cifra podía ser mucho mayor.

En una entrevista con el medio noticioso Martí Noticias, la Dra. Dalilia Garcés, especialista en Epidemiología explicó, «No sabemos los recursos que tiene o no tiene Cuba para poder hacer el análisis en todas las personas que tienen síntomas”.

“Tampoco sabemos si quieren decir la verdad. Hay muchas razones por la que los números pueden ser diferentes a los que ellos dan», agregó la especialista.

De acuerdo con los especialistas, aproximadamente el 60% de las personas infectadas con el Oropouche presentan síntomas y muchas ellas ni siquiera van a un médico. Aunque no existe tratamiento se requieren medicinas para aliviar los síntomas.

A finales de mayo, las autoridades sanitarias cubanas confirmaron los primeros casos del virus en dos municipios de Santiago de Cuba, pese a que ya la población se venía quejando mucho antes de una rara enfermedad que los médicos no sabían que era.

Según una actualización de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC por sus siglas en inglés), que mantiene a Cuba en alerta de nivel 2, en una escala de 4, por el brote del Oropouche, indica que en Estados Unidos se han detectado este añó 74 casos, 70 de los cuales pertenecen a Florida y están vinculados a Cuba.

En el mes de julio, autoridades sanitarias de España, daban a conocer 6 casos de turistas que habían ingresado al país portando la enfermedad y que venían de vacaciones en Cuba.

En el sitio oficial del ECDC, publicaba en ese entonces un informe sobre el comportamiento de enfermedades durante la semana del 6 al 12 de julio, donde se da a conocer que seis turistas habían adquirido el virus durante su estancia en Cuba.

Y en el mes de agosto, se daba a conocer el primer caso detectado en Islas Canarias, de igual forma importado desde Cuba, mientras el régimen comunista continúa vendiendo el destino cuba como seguro.

La crisis actual a la que ha sumergido el régimen comunista al país, propicia las condiciones ideales para la proliferación del Oropouche y otras enfermedades de transmisión, como el Dengue, del cual ya se conocen múltiples casos.

Las calles llenas de basura, la escasez de productos para la higiene y los altos costos por una inflación galopante, son el ambiente perfecto para que se desarrolle una pandemia de grandes dimensiones.

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